“Ando sobre rastrojos de difuntos, / y sin calor de nadie y sin consuelo / voy de mi corazón a mis asuntos”. Lo escribió un tal Miguel Hernández, nacido hace cien años en Orihuela, Alicante, pero sus palabras hablan de algo que nos resulta tremendamente cercano. Los andaluces, como pueblo sureño que somos, sabemos mucho de esa mezcla de fe y rutina, de superstición y costumbre con la que tratamos la muerte. Es algo íntimamente cosido a nuestra cultura relacionarnos con la muerte aunando en esa mirada el rito y lo cotidiano.

Noviembre es el mes en el que definitivamente se abren camino los días grises, las tardes cortas y ese frío prudente que tenemos por aquí como heraldo del invierno. Pero, indudablemente, noviembre es también para nosotros la estampa de decenas de mujeres y hombres caminando el sábado por la tarde hacia un cementerio recién encalado, casi brillante bajo el sol tibio del otoño, para improvisar una primavera de flores nuevas en las lápidas de sus difuntos.

En fin, la muerte. Desde la más tribal a la más evolucionada, no ha existido cultura, civilización, o grupo de personas, que la haya contemplado con indiferencia. En unos casos con miedo, en otros con respeto y devoción, en otros incluso con fiesta y alegría, todas las sociedades han construido una mitología propia para arropar ese momento, para rodear de liturgia y costumbre ese instante que, según credo o ideología, puede ser tomado como fin o como tránsito.

En Pandora hemos querido centrar la mayoría de los contenidos de noviembre en este tema, para ofreceros nuestra particular mirada, y os invitamos a que aportéis la vuestra. Más abajo, en el índice de contenidos tenéis datos más concretos, aunque ya os adelantamos que, como siempre, hay de todo: Un poco de libros, un poco de música, un poco de historia, varios relatos, poemas...y un estupendo montaje fotográfico con distintas representaciones de la muerte que no tiene desperdicio. Nos referimos al montaje, claro.

Este mes también hemos cambiado un poco el formato del concurso: En lugar de la pregunta habitual os proponemos un curioso reto que seguro que os resultará de lo más estimulante, especialmente si sois aficionados a escribir. Si queréis más detalles no tenéis más que girar la ruedecilla del ratón hacia abajo, no seáis vagos.

Ah, hablando de vagos, como no tenemos telepatía no vamos a poder deleitarnos con las cientos de respuestas que se os han ocurrido a la pregunta de Octubre y que no habéis mandado. Nos limitaremos a escoger entre las pocas que sí han llegado: La más ingeniosa este mes es la del amigo Carlos, la del fotomatón...etc...etc...Tu premio, Carlos, vamos a guardarlo en secreto. Un consejo: No salgas sólo de noche, y si lo haces, no te acerques a ningún extraño, sobre todo si lo ves hablando sólo en mitad de la calle mientras sujeta un cuchillo jamonero y un saco.

Y a los demás, lo dicho. Es un número de la revista un tanto especial, ojalá os guste. Esperamos ansiosos vuestras aportaciones y comentarios.

Pandora.