6 comentarios
El final de la película Sommersby (lo que he llorado yo con esta pelí que he visto muchas veces), del libro "El amor en los tiempos del Colera", de los amigos de verano que van y vienen, el final del instituto dejando a tras un momento de tu vida.
El final de la Vida es Bella, cuando el niño grita: "Papá, papá, hemos ganado el carro!"
Buenoooo... quien no haya visto la película que la vea porque es increíble.
May
Uno de mis finales favoritos, de mis películas favoritas en realidad, es el de "Big Fish", de Tim Burton.Es una película que se narra como un cuento, que habla de un hombre que adornó su vida con toneladas de fantasía, como si la realidad le quedara estrecha. Un pez muy grande, en un estanque muy pequeño, de ahí el título. El narrador, su hijo, termina diciendo: "Un hombre cuenta sus historias tantas veces que al final él mismo se convierte en esas historias. Siguen viviendo cuando él ya no está. Y de este modo, el hombre se hace inmortal." Casi nada.
Hay muchos finales que me gustan, pero uno de los que más es el de la película “El Padrino I”. La esposa de Michael Corleone le pregunta si es cierto, y con ello se refiere a que si lo es todo lo que de él se está diciendo, que se ha convertido en un mafioso despiadado y que acaba de zanjar varios asuntos pendientes a base de derramar mucha sangre. Él, con cinismo y frialdad, le contesta que no y la abraza para tranquilizarla. Para comprender este momento y el que sigue hay que conocer la trayectoria de este personaje quien, según los planes de su padre, iba a ser el más “decente” y preparado de la familia, el que se iba a mantener limpio, alejado de los asuntos sucios. La última escena nos llega desde la perspectiva de la esposa que, tras recibir ese "no" tranquilizador, ha abandonado el despacho para servir dos copas, y que ve con perplejidad cómo van llegando unos hombres a ese mismo despacho mostrando admiración y respeto a su marido, y besando la mano de éste como tantas veces había visto hacer con la de su suegro, mientras oye cómo se dirigen a él con el tratamiento de “Don Corleone”.
Finales magestuosos podria citar decenas, pero el que he visto ultimamente "me dejó un neceser con agravios, la miel en los labios y escarcha en el pelo", todo eso acompañado, como no, de unas lagrimillas y el pelo de gallina. Hablo del final de "Bailando con lobos". Simplemente os la recomiendo, no digo mas.